De Riad a Madrid pasando por París, Venecia y Maldivas: el incansable recorrido de Georgina en la tercera temporada de su reality

Con el estreno de la nueva temporada de su programa, Soy Georgina, repasamos los impresionantes destinos que la modelo visita junto a su pareja y amigos.

«Mi presente lo decido yo, y amo lo que hago». Con estas palabras claras y directas, Georgina Rodríguez (30 años) daba inicio a la tercera temporada de su exitoso reality. En tan solo dos años, la vida de la pareja de Cristiano Ronaldo (39) ha alcanzado una notoriedad pública impresionante, con la atención constante sobre sus viajes y lujos.

Aunque disfrutan de una vida rodeada de privilegios, la rutina de la familia formada por Cristiano y Georgina es una montaña rusa de emociones y cambios. Viajan constantemente, como se refleja en la última entrega del programa, en la que ciudades tan diversas como París, Madrid o Dubái sirven de escenario para sus aventuras, llenas de amor y elegancia.

A principios del año pasado, la noticia que acaparó todos los titulares fue el fichaje de Cristiano por el Al-Nassr de Arabia Saudí, marcando el inicio de una nueva etapa. Tras su llegada a Riad, la familia se instaló primero en un exclusivo hotel, para luego mudarse a una lujosa residencia. Georgina compartía su alegría diciendo: «Mis días en Riad son muy ocupados y felices», mientras disfrutaba de su nueva vida a 7.000 kilómetros de su tierra natal. Además de entrenar y cuidar de sus hijos, la modelo ha tenido la oportunidad de conocer a personalidades del deporte como Rio Ferdinand (45) y Conor McGregor (36), durante eventos de boxeo en la capital saudí.

Además, la familia estuvo presente en el primer partido de Cristiano con el Al-Nassr, un momento de orgullo para todos. Georgina también aprovechó para anunciar nuevas colaboraciones, destacando su trabajo con la marca de perfumes L’Avene.

Aunque ha establecido su residencia en Arabia, Georgina sigue teniendo Madrid como un punto clave en su vida profesional. En varias ocasiones, ha viajado a la capital española en su jet privado, donde ha protagonizado portadas de revistas como Vogue Portugal y Guess, deslumbrando con cambios de imagen sorprendentes. También, su amor por la familia la llevó a visitar el estadio Santiago Bernabéu con sus hijos Cristiano Junior y Mateo, reviviendo los momentos de gloria de Cristiano en el Real Madrid.

Durante la Semana de la Moda en París, Georgina se desplazó a la capital francesa para asistir al desfile de Loewe, donde su look volvió a captar la atención. Allí, se encontró con la cantante Bad Gyal, ídolo de sus hijos, quienes no pudieron evitar emocionarse al hablar con ella por videollamada.

Entre el desfile parisino y el Festival de Venecia, la familia disfrutó de unos días de descanso en el Mar Rojo. Durante esos momentos, Georgina reflexionó sobre sus privilegios, afirmando que el mayor lujo que poseen es la familia que han construido.

El Festival de Venecia, uno de los eventos más esperados por Georgina, fue otra de las grandes paradas de la temporada. Acompañada de su inseparable grupo de amigas, conocido como «las queridas», deslumbró en la alfombra roja con un vestido rojo de Vetements, de la colección Primavera-Verano 2024.

Por último, este año ha sido especial para Georgina, ya que celebró su 30 cumpleaños en las islas Maldivas, uno de sus destinos de ensueño. Rodeada de sus hijos, amigos cercanos y Cristiano, la influencer disfrutó de actividades como nadar con tiburones y hacer submarinismo. Incluso aprovechó la ocasión para grabar el video «¿Qué hay en mi bolso?» para Vogue México.

A pesar de la opulencia que rodea su vida, Georgina siempre se encarga de inculcar en sus hijos la importancia de la gratitud, recordándoles el valor de estar agradecidos por todo lo que tienen.