Alcaraz y Djokovic: un duelo de altura en Melbourne

El español avanza a cuartos tras el abandono de Draper en dos sets (7-5 y 6-1) y se prepara para enfrentar al serbio, quien superó a Lehecka con autoridad (6-3, 6-4 y 7-6(4)). Las cámaras no pierden detalle: “¡Crac-crac-crac…!”. Los fotógrafos disfrutan inmortalizando las hazañas de Carlos Alcaraz, un torbellino de movimiento, destreza y estilo sobre la pista central. Sin embargo, el espectáculo se acorta cuando Jack Draper, aquejado de molestias en la cadera, no logra continuar pese a la intervención del fisioterapeuta. En apenas 1 hora y 35 minutos, el británico se rinde (7-5 y 6-1), dejando a Alcaraz con una nueva oportunidad en los cuartos del Abierto de Australia, donde buscará redimirse de la eliminación sufrida el año pasado ante Zverev. Esta vez, el oponente es otro coloso: Novak Djokovic.

Un desafío colosal
Melbourne se prepara para un choque vibrante. El serbio, tras imponerse a Lehecka, llega en ascenso. Su dominio en esta pista es legendario, y su experiencia le permite manejar la presión como pocos. Djokovic no solo busca ganar, sino también añadir un nuevo hito a su carrera al alcanzar su 25º título de Grand Slam, dejando atrás a Margaret Court.

Por su parte, Alcaraz mantiene una mentalidad serena y un enfoque en el presente. “Lo que aprendí en mi último Grand Slam es que hay que ir día a día. Pensar en el futuro solo añade peso, y lo importante es estar al 100% en cada partido”, reflexiona el murciano, que luce zapatillas inspiradas en Andre Agassi y comparte consejos con grandes como John McEnroe.

El duelo que todos esperan
Mientras Alcaraz perfecciona cada detalle para este enfrentamiento, Djokovic sigue su marcha imparable. A sus 37 años, el serbio desafía la lógica, mostrando un espíritu competitivo que no cede. En su último partido, exhibió un control absoluto, demostrando por qué la pista central de Melbourne es su territorio.

Una controversia en la sombra
Sin embargo, el avance del serbio no ha estado exento de polémicas. Después de vencer a Lehecka, Djokovic se negó a realizar la tradicional entrevista en pista. Más tarde explicó su decisión: un periodista australiano de Channel 9 lo calificó de “fracasado” y “sobrevalorado” en una retransmisión, generando tensiones que el canal no ha resuelto. “No tengo nada en contra del público ni de Jim Courier, pero esta situación ha sido incómoda”, declaró.

El espectáculo continúa
Con estos antecedentes, el partido entre Alcaraz y Djokovic promete ser un manjar para los aficionados. Dos generaciones, dos estilos, dos titanes del tenis dispuestos a darlo todo en una batalla que quedará grabada en la historia de Melbourne.