La compra del histórico Palau Frederic Marcet, que albergaba el antiguo cine Comedia, marca un paso clave para el futuro Museo Thyssen en Barcelona. El fondo de inversión Stoneweg, encargado de la operación, ha destinado más de 100 millones de euros para la adquisición y reforma del edificio, que se transformará en la sede de la colección de pintura catalana de Carmen Thyssen. Este ambicioso proyecto, dirigido por Jaume Sabater, presidente de Stoneweg, y Xavi Pujol, su consejero delegado en España, prevé una renovación estructural a cargo de dos estudios de arquitectura, uno catalán y otro alemán, con un plazo de ejecución estimado en dos años.
Un nuevo hogar para el arte catalán
La emblemática colección, que incluye 400 obras de los siglos XIX, XX y XXI, encontrará un espacio permanente en este edificio tras llegar a un acuerdo con la familia Pla i Planas, antiguos propietarios del inmueble. El Palau Marcet se perfila como una alternativa ideal tras descartarse otras opciones debido a las complejidades urbanísticas y económicas que implicaban los alquileres de las tiendas de Massimo Dutti, Oysho y Guess, ubicadas en el edificio. Según un informe reciente de Cushman & Wakefield, el Paseo de Gràcia es la calle más cara de España, con alquileres que alcanzan los 3.000 euros por metro cuadrado.
Gestión y futuro del museo
Paralelamente a la compra, Stoneweg y el Grupo Thyssen han mantenido reuniones para definir la dirección y las líneas estratégicas de la futura pinacoteca. Según el Grupo Thyssen Collection, tanto Carmen Thyssen como Juan Manel Sevillano, director de la división cultural de Stoneweg, han avanzado en la selección del equipo que liderará esta nueva institución cultural.
Impacto cultural y urbano
El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha celebrado la adquisición del Palau Marcet como «una excelente noticia para la ciudad», destacando que el nuevo museo privado diversificará la oferta cultural del centro urbano y reforzará la posición de Barcelona como capital cultural. En sus palabras, este proyecto, junto con las ampliaciones previstas del MACBA y el MNAC, marcará un «salto histórico» en el panorama museístico de la ciudad. Collboni, la baronesa Thyssen y representantes de Stoneweg anunciarán próximamente más detalles en una rueda de prensa.
Por su parte, la consejera de Cultura, Sònia Hernández, ha mostrado su apoyo al proyecto, aunque expresó su deseo de que este no afecte la continuidad del Espacio Carmen Thyssen en Sant Feliu de Guíxols, inaugurado en 2012.
Una larga historia de planes museísticos en Barcelona
La intención de Carmen Thyssen de establecer un museo en la capital catalana se hizo pública hace nueve meses, aunque sus planes para exponer parte de su colección en Barcelona datan de 2012, cuando propuso el pabellón Victoria Eugenia de la Fira de Barcelona como sede. Sin embargo, dicho espacio fue destinado a la ampliación del MNAC.
Actualmente, Carmen Thyssen cuenta con museos en Málaga y Andorra, además de un espacio expositivo en Sant Feliu de Guíxols y obras en la Fundación Thyssen-Bornemisza de Madrid y el MNAC. Según el Grupo Thyssen Collection, el museo de Barcelona será el inicio de una expansión más amplia, con planes para abrir nuevas sedes en otras ciudades españolas.
Este proyecto consolida a Barcelona como epicentro cultural, con un museo que promete ser un referente en la promoción del arte catalán y un legado vivo de la baronesa Carmen Thyssen.