Nuevo restaurante en la antigua casa de Adolfo Suárez busca ser el referente gastronómico en Ávila

Diego Sanz, antiguo segundo jefe de cocina en Barro, lidera un ambicioso proyecto culinario, Caleña, que abrirá sus puertas el 7 de noviembre. Sanz, junto con Cristina Massuh y Diego Ortega, director del hotel boutique La Casa del Presidente —antigua residencia del expresidente Adolfo Suárez—, emprenden esta aventura gastronómica en un espacio histórico, con vistas a la muralla de Ávila, que combina el pasado medieval con la memoria contemporánea de España.

La transformación del espacio inició en 2021, cuando La Casa del Presidente comenzó a ofrecer cenas asesoradas por el chef Andrés Madrigal. Pero Ortega tenía en mente algo más innovador y, tras algunas conversaciones, conoció a Diego Sanz y Cristina Massuh, quienes se unieron al proyecto tras su experiencia en Barro.

Inspirado en la piedra típica de la sierra madrileña y las tradiciones de Castilla, Caleña rinde homenaje a la cocina de proximidad, destacando productos locales y de temporada. Según Ortega, Castilla no ha seguido el mismo ritmo en la escena gastronómica que otras regiones, y con Caleña se propone sacar a relucir el talento joven y local que apuesta por el territorio.

El restaurante trabaja con microproductores y proveedores cercanos como Obrador Abantos en El Escorial para el pan, Granja Redondo para los huevos, y Tierra Campesina para verduras frescas. En su carta, apuestan por un menú de temporada con 24 platos diseñados para compartir y con un enfoque en escabeches, guisos y productos frescos de la huerta. Entre las especialidades destacan la ostra con corazones de pollo y el cabrito de Gredos, combinando sabores únicos de mar y montaña.

El equipo de Caleña quiere marcar la diferencia manteniendo una carta viva que invite a los comensales a regresar cada temporada. Su visión de una experiencia gastronómica relajada y divertida evita los menús fijos, permitiendo a cada persona construir su propio recorrido culinario. Aún en su fase inicial, no descartan transformarse en un futuro para optar por una estrella Michelin, aunque su prioridad ahora es crear un ambiente acogedor y memorable.

La apertura oficial será el 7 de noviembre, con una pequeña inauguración previa con amigos del sector, que evaluarán el concepto y los platos. Con este nuevo espacio, Sanz, Massuh y Ortega esperan dar vida a un lugar que honre el espíritu de la cocina castellana y sea recordado por su calidez y sabor.