El Estadio de la Cartuja en Sevilla se prepara para convertirse en uno de los coliseos más grandes de España tras su ambiciosa remodelación. Con una capacidad planificada de 70,000 espectadores, superará a San Mamés y se posicionará solo por detrás del nuevo Camp Nou y el Santiago Bernabéu. La reforma, que ya ha comenzado, incluye la eliminación de la pista de atletismo y la construcción de nuevas gradas. Se espera que el proyecto esté terminado para el segundo semestre de 2028, justo a tiempo para el Mundial de 2030.
Las obras de remodelación, lideradas por los arquitectos Antonio Cruz y Antonio Ortiz, se realizarán en dos fases. La primera fase, con un presupuesto de 12 millones de euros, se centrará en la ampliación de las gradas y se desarrollará hasta abril de 2025. Durante esta etapa, el Real Betis utilizará el estadio temporalmente mientras renueva su propio campo, el Benito Villamarín.
La segunda fase, prevista para comenzar en 2027 con un presupuesto de 100 millones de euros, incluirá una reforma profunda de las instalaciones, mejoras en los accesos y la modernización de la fachada, además de una nueva cubierta de vidrio. Esta transformación convertirá a La Cartuja en una instalación multifuncional, apta para eventos deportivos y culturales, y la posicionará como un referente tanto nacional como internacional.